ARMORED SAINT – SYMBOL OF SALVATION – 1991

ARMORED SAINT – SYMBOL OF SALVATION – 1991


Y ya que andamos comentando acerca de los porqués e incógnitas que han llevado a la banda Anthrax a su casi destrucción, tenmos ahora para hablar de la banda de la cual salio el gran John Bush, Armored Saint. Este es el cuarto disco de estos chamacos el cual en mi opinión es sorprendente, otra de esas joyitas adelantadas a su tiempo de las cuales hay mucho que decir. En estos años en medio del apogeo de onda grunge la cual casi destruye el heavy metal tal y como lo conocemos, este grupo graba el que para mí es el mejor disco que han grabado a lo largo de su historia y esto lo afirmo porque es donde escucho a un John Bush sumamente bien desarrollado como cantante, el que noto que matiza más su voz inclusive mejor que con Anthrax, banda a la que paso a formar parte en 1993 grabando con ellos el aclamado “Sound of White Noise” (1993) el cual fue un disco también revolucionario y adelantado a su tiempo, pero esa es otra historia que más adelante les comentaré en otra reseña.

Una de las cosas que me agrada de Armored Saint es que no se parecen a ningún grupo, poseen un estilo propio y que en este material se cuajó a la perfección, tocando un heavy metal sin los clásicos riffs del género, sino que dándoles otra forma, otro matiz, otra cadencia, la cual para su tiempo también fue un disco poco comprendido y del que en ese entonces recibieron muchas quejas, además de tener que luchar con el demonio de la falta de distribución y apoyo por parte de las disqueras de ese entonces enfocadas a descubrir nuevas bandas de grunge, que era lo que estaba de moda ene se entonces y que orilló a que muchos grupos variara y alteraran su estilo llevándolos a sucumbir a algunos y a destruirse a otros. El material como les dije es tremendo, con una producción bastante buena, aunque la calidad de grabación se nota bastante limitada pues el disco fue grabado con poco volumen y hay que subirle al estereo para que puedas apreciarlo con más detenimiento. Phil Sandoval y Jef Duncan hacen un trabajo excepcional con las guitarras, con unos riffs potentes y aguerridos que también estriban en lo melódico y unos solos excelentes, lejos del shredding y que te dejan con un buen sabor de boca. Un disco versátil, divertido, fácil de escuchar y en el que se destacan todos como músicos. Muy recomendable para los amantes del buen metal clásico. El disco contiene 13 canciones de las cuales destacan: “Reign of fire", “Droopping like flies”, “Tribal dance”, “Another day”, “Warzone”, “Burning question”, “Tainted past” y “Spineless”. El disco fue relanzado en el 2003 bajo el sello de Metal Blade records, como un box set de 3 discos, donde en el disco uno hay 2 videos promociónales de la banda. El disco salio a la venta el 14 de mayo de 1991 bajo el sello de Metal Blade records.

Calificación: 10 de 10 puntos.

SAVATAGE – HALL OF THE MOUNTAIN KING – 1987

SAVATAGE – HALL OF THE MOUNTAIN KING – 1987


Eso es a lo que yo le llamo un verdadero gran trabajo en el que escuchamos magistralita, ganas de hacer bien las cosas y sobre todo, entrega hacia los fans y hacia sí mismos. Este fue el tercer trabajo de esta gran banda pionera del metal progresivo y de la que gracias a ella existen bandas similares en nuestros días tales como Nevermore. En este entonces cuando escuche este disco que la verdad de ochenteno no tiene nada más que la fecha, escuchamos una música sumamente adelantada a su tiempo, con virtuosismo, con tremendos riffs de guitarra y unos solos de guitarra que no tienen nada que envidiarle a los shredders modernos y que sobre todo los temas son trepidantemente geniales. Esta es de las pocas bandas que se pueden preciar de tener una carrera impecable dentro del difícil terreno del metal y que sobre todo tienen buenos discos a lo largo de ella que hicieron época y que le aportaron mucho a las generaciones pasadas, presentes y futuras. Una banda incomprendida en su tiempo, que nadaba en contra e la corriente del Glam metal y que logró sobrevivir a ella y jamás se vendio, que fue despreciada e ignorada por gente poco conocedora de la buena música pero que sobre todo influyó fuertemente en la dirección que tomó la música metal en la actualidad. El disco contiene 10 temas duros y tajantes de los cuales estacan: “24 hours ago”, “Beyond the Doors of the dark”, “Legions”, “Strange wings”, “Hall of the mountain king”, “The price you pay” y “Devastation”. El disco salio a la venta en medio del torrente del Glam metal el 28 de septiembre de 1987 bajo el sello de Atlantic records.


Calificación: 9 de 10 puntos.

LOCK UP – HATE BREEDS SUFFERING - 2002

LOCK UP – HATE BREEDS SUFFERING - 2002


He aquí el segundo trabajo de otro portento del metal, un trabajo digno de ser escuchado hasta el cansancio y considerado al menos para mí y para la crítica como uno de los mejores discos de grindcore metal en la historia de este género, y como no decir esto, pues aquí tenemos a 4 grandes talentos: primero en las voces reemplazando a Peter Tatgren, tenemos al gran Tomas Lindberg de la banda desaparecida pero no menos legendaria At The Gates. En la guitarra es genio creador de la gran banda padre del grindcore Napalm Death Jesee Pintado quien falleciera hace ya algunos años y también el bajista de Napalm Death Shane Embury y el titán dios de los tambores Nicholas Howard Barker quien como muchos conocemos perteneció en su momento a Cradle of Filth, Dimmu Borgir, Testament y Benediction entre otras más. Este álbum tiene la peculiaridad de la preferencia que tenían estos chamacos por los cantantes suecos ya que tanto Tatgren y Lindberg son procedentes de Suecia y pilares de las bandas más importantes del death de ese país, tales como At The Gates y Hypocrisy. La producción de este disco es muy buena, pues solo goza de la suficiente tecnología para su grabación la cual es excelente. La guitarra de Pintado suena como salida del mismo infierno, aunque notamos muchos dejos y riffs muy semejantes a los de Napalm Death, sobre todo de sus inicios. Pero lo más delicioso de este disco es la poderosa batería de Nick Barker quien demuestra por enésima vez quien es quien en este instrumento, ya que sus blast beats exactos y precisos además de las magistrales secuencias de doble bombo que maneja hacen que este disco sea como dije un portento del death metal. Un material muy recomendable, aunque difícil de conseguir en este momento para los amantes del buen grindcore furioso, técnico, salvaje, lleno de ira y de esa potencia que solo el mismísimo Satán puede hacer tocar a estos chamacos procedentes de Inglaterra con excepción de Lindbergh. Intenten conseguirlo a como de lugar, pues es un trabajo que no se deben dar el lujo de pasar por alto. El disco contiene 16 canciones de las cuales destacan todas y es de esos discos que los escuchas de principio a in y que no te cansan (bueno al menos no a los amantes del metal). La edición japonesa contiene 3 temas extra que son: "Satan's Generation", "The Dreams Are Sacrificed (live)" y "Storm of Stress (live)". El disco salio a la venta el 21 de enero del 2002 bajo el sello de Nuclear Blast records.


Calificación: 10 de 10 puntos.

ANTHRAX – SPREADING THE DISEASE – 1985

ANTHRAX – SPREADING THE DISEASE – 1985



Y ya que andamos reseñando trabajos de ex integrantes de esta gran banda, que mejor oportunidad para hablar de un disco emblemático y que sentó la base para lo que años más tarde se consolidaría con una carrera exitosa en los albores de esta música. Aunque el disco tiene muchos matices más cercanos al heavy clásico que al Speed metal, no deja de ser un verdadero clásico del mundo del metal. Aquí tenemos el debut de Joe Belladonna en las voces reemplazando al Neil Turbin y al bajista Frank Bello, sobrino de Charlie Benante (nepotismo hay hasta en el metal) reemplazando al Dan Lilker. Definitivamente es una joya, quien lo haya escuchado probablemente se atreva a decir que es el mejor disco de Anthrax en la época 85-90, puesto que el trabajo vocal de Belladonna es impecable, los matices de su voz, la energía que le mete y el Keeling verdaderamente no lo volví a escuchar en sus posteriores discos, pues aquí es donde me di cuenta y muchos de nosotros seguramente que también que era uno de los mejores cantantes de metal de la época de los ochentas y que al menos Scott Ian no se puede quejar de que lo que se hizo en este entonces fue lo mejor y difícilmente volverán a repetir el éxito que tuvieran en ese entonces no obstante los vanos intentos de “evolución” que están haciendo. Cualquiera que sea la acepción que se le quiera dar al asunto, estamos ante una verdadera obra maestra del metal, con cancones compuestas a conciencia y con una producción envidiable para su época. Dan Spitz hace un trabajo increíble con la guitarra, pues es en este disco en el que escuchamos sus mejores solos de toda su carrera, antes de que también notáramos su estancamiento como músico y sus litaciones con el instrumento, pero con todo si quieres de vera apreciar un verdadero trabajo de guitarra eléctrica, les aconsejo que escuchen este disco, que lejos muy lejos de los shredders de este entonces, tenemos un trabajo de requinteo, muy bien elaborado, interpretado y con la técnica suficiente para destacar entre los mejores guitarristas de la época. Lee recomiendo ampliamente este disco que para mi juicio es aun superior al “Amog the living” (1986) no tanto por lo poderoso de su speed metal, sino por lo elaborado que es y por que muestra lo destacados que son como músicos. El disco contiene 9 canciones de las cuales destacan: “A.I.R.”, “Lone Justice”, “Madhouse”, “Medusa”, “Armed and dangerous” y “Gung-ho”. El disco salio a la venta el 30 de octubre de 1985 bajo el sello de Island records.


Calificación 10 de 10 puntos.

NEIL TURBIN – THREATCON DELTA – 2003

NEIL TURBIN – THREATCON DELTA – 2003



Único disco grabado a la fecha de este miembro fundador de una de las bandas más trascendentales del mundo del metal y me refiero a los grandes Anthrax. Si bien su partida de la banda solo sirvió para favorecerlos más y permitirles un gran despegue a nivel mundial e histórico cosa que tuvo su altibajo pero esa es otra historia. La curiosidad me comió cuando andando en una tienda de discos ubicada en un centro comercial al norte de la ciudad en la sección de rock alternativo (ya saben que tienda es, al menos los que viven en la blanca Mérida) encontré esta pequeña joya, que si bien no es el disco del año, sí que representa el intento de regreso a los escenarios de uno de los cantantes poco conocidos pero que marcaron el inicio de una época, me refiero al gran Neil Turbin.

Por allá de 1984-85 este personaje abandona Anthrax por diferencias aparentemente musicales (cosa que años más tarde Charlie Benante baterista de Anthrax declarara en la prensa que Neil Turbin no cumplía con las expectativas vocales que la banda necesitaba para su evolución musical, cosa que también sirvió de pretexto para aparentemente expulsar también a Joe Belladonna, a John Bush y a Joe Belladonna nuevamente en el 2005 después de su tan esperada reunión (¿?)) pero que trascendió que no se llevaba del todo bien con el entonces bajista Dan Lilker quien de fuera más tarde a crear Nucklear Assault, otra banda monstruosa de Speed metal y algunas diferencias con Scott Ian fueron lo que también orillaron su salida. Definitivamente me atrevo a decir que en esta época en que Neil Turbin grabó el poco conocido “Fistful of metal” (1984) con Anthrax, se dio el llamado síndrome de Iron Maiden, en donde una situación similar motivó a que Paul Dianno fuera reemplazado por el gran Bruce Dickinson por limitaciones vocales y diferencias musicales y de imagen. Como dice el dicho cada quein busca llevar agua a su molino sin medir a quien perjudican aunque sea a sí mismos. Lamentablemente para Anthrax esta no fue la excepción y es que muchos de nosotros nos preguntamos que hubiera sucedido si Joe Belladonna no hubiera entrado a Anthrax y la verdad amigos lectores, no hay un respuesta concreta aunque sí muchas conjeturas. En esos años de ausencia Neil Turbin se avocó a seguir incursionando en el metal integrándose a algunas bandas pero no lo consiguió, y fue hasta casi 20 años después de su expulsión o salida de Anthrax cuando decidió probar fortuna e integrar por si mismo un proyecto solista denominado inicialmente Deathriders, pero que más tarde solo sería Neil Turbin’s Deathriders y finalmente Neil Turbin. Estoy sorprendido de tener este CD en mis manos adquirido al ridículo precio de 180 pesos y tras darle un par de escuchadas me encuentro con disco bastante bueno. Neil Turbin experimento con un heavy metal muy modernizado con muchos matices referentes a la vieja escuela, puesto que el disco contó con la suficiente producción que justifique una buena capacidad técnica al momento de grabarlo, lo que se traduce en una calidad de grabación bastante pobre y fría, si les puedo decir que el disco tiene mucho que ofrecer, puesto que las ganas que este personaje le metió a su material en solitario justifica los medios. Las canciones son muy diferentes entre sí, son metaleras pero muy distintas entre sí, puesto que por momentos hay guitarras de 7 cuerdas, afinaciones bajas, con tintes medio Aggro y a veces medio power y a veces 100% heavy de la vieja escuela, donde escuchamos guitarras contundentes, con riffs agresivos, pero sobre todo escuchamos a un Neil Turbin bastante en buena forma vocalmente hablando y que sinceramente ha logrado educar y entrenar su voz a tal grado que sería un digno rival simlos pusiéramos a competir con Belladonna o con el mismo John Bush. Incluso muchos hemos llegado a creer que Turbin hubiera hecho un mejor papel que Bush en la época en que se grabó “Sound of White Boise” (1993) de la banda Anthrax. Un destacado trabajo que supera incluso al que Belladonna sacara en solitario y que lamentablemente quedó en el olvido y sepultado por las densas arnas del tiempo, pero que sin lugar a dudas fue también pieza clave en la fundación y creación de un proyecto que hasta el día de hoy es recordado con mucho cariño. El disco contiene 14 temas cosa que no apruebo mucho ya que lo hace un poco cansado de escuchar de los cuales destacan: “Cut to th chase”, “What you can’t control”, “Keep the fire", “Rat race”, el cover de AC/DC “Touch too much”, “Dog eat everything” y “Piece of me”. El disco salio a la venta el 16 de enero del 2003 bajo el sello de Metal Mayhem records.


Calificación: 8 de 10 puntos.

BELLADONNA – 1995

BELLADONNA – 1995


He aquí una e las cuestiones que solo me hacen preguntarme mil millones de veces a mi mismo (en los lapsos en que no tengo nada que hacer) “¿Lo sacaron o se fue?”. Y hasta el momento después de haber leído miles de paginas en Internet y un montón de revistas alusivas al tema y todavía no encuentro respuesta alguna que justifique la razón de su partida de Anthrax, cosa que para bien o mal, le dio una importante lección a Scot Ian y sus lacayos de porque a veces uno comete errores que a la postre acaban por destruir casi por completo un mito… una leyenda. Después de su salida de Anthrax Joe Belladonna se enfrascó en sacar un disco en solitario a fin de demostrarle a sus ex compañeros que él todavía seguía vigente y que aún permanencia en el recuerdo y en los corazones de muchos de los fans que fielmente siguieron a Anthrax a lo lago de los ochentas y principios de los noventas. Yo en lo personal había escuchado rumores y aseveraciones de que Beladonna seguía vivo y de pie y que había grabado 2 o 3 discos como solista y que no sonaba tan mal, aunque claro, yo permanecí escéptico al respecto. En uno de estos fines de semana fui a las bellas playas del caribe mexicano, más bien a la ciudad de Cancun y andando mas o menos en el centro de la ciudad, encontré un local de venta especializada en CD’s e heavy metal bastante bien surtida y con mucho material, y por azares del destino encontré 2 discos de Joe Belladonna trabajando el solitario, cosa que me sorprendió en lo personal (y es que no hice siquiera el esfuerzo de indagar en la red de redes si Belladonna en verdad tenía discos en solitario… que iluso de mi) así que al menos me avocaré a reseñarles este que es el primero de sus discos. La portada es bastante sencilla con una foto de él con su característico llamémosle sombrero de plumas que en muchas ocasiones vistiera cuando interpretaba en vivo con sus ex compañeros el tema “Indians” y que ahora aparece en su disco en solitario, obvio es que este sombrero de plumas fue un verdadero cliché y emblema que no podía faltar en los concierto de Anthrax pero bueno… asi fue. El disco no presenta nada sorprendente, excepto un heavy metal bastante denso y agresivo, con ciertas tendencias al Aggro metal, estilo que a Belladonna no le queda pero en absoluto, ya que su, eso sí, muy educada voz (producto del fanatismo por bandas de rock setentera como Journey) no se presta a este tipo de música, tal vez esa haya sido la situación por la que dejó Anthrax pero esa es otra historia. Lo que sí note es que Beladonna se esfuerza por modular y adecuar su voz a este estilo pero solo notamos a un hombre desgastado, plano frío y que a voces y a gritos se nota que le pesa la ausencia de Anthrax y no es para menos pues los muchos seguidores de Anthrax seguimos con la música de ellos metida en la cabeza y en el corazón. La producción del disco es bastante frívola, poco creativa, con muchas canciones, un poco cansado de oír aunque tiene unas 3 o 4 o 5 canciones que mas o menos se defienden y dejan un poco a flote este material bastante extraño pero a la vez interesante porque deja ver hacia que dirección se dirigió esta leyenda viviente que es el señor Joe Belladona quien como quiera que sea, fue un miembro clave en la historia de la cuarta más grande banda de thrash/Speed metal de la historia de la música. El disco contiene 13 cancones de las cuales destacan: “Blunt man”, “Power trip”, “Perfection”, “Two faced”, “Last call”, “Nothing to hide” y “Mixed emotions”. El disco salio a la venta el 18 de julio de 1995 bajo el sello de Mausoleum records.


Calificación 6 de 10 puntos.